¿Que son organizadores gráficos?
Un organizador gráfico es una representación visual que comunica una estructura lógica de un contenido.
Los organizadores gráficos pueden utilizarse en cualquier momento del proceso de enseñanza, pero son recomendables al concluir el proceso como instrumentos de evaluación porque permiten que los alumnos expresen y representen sus conocimientos sobre conceptos y las relaciones existentes entre ellos (Díaz Barriga, 2010).
De esta forma, entre los organizadores gráficos más usados están los cuadros sinópticos, los mapas conceptuales, los cuadros de doble entrada, los diagramas de árbol y las redes semánticas.
Finalidad de los organizadores gráficos
Los organizadores gráficos, como instrumentos de evaluación, permiten identificar los aspectos que los alumnos consideran relevantes de determinado contenido y la forma en que los ordenan o relacionan.
Procedimiento para usar organizadores gráficos
Para usar organizadores gráficos como instrumentos de evaluación, es necesario:
- En primer lugar, definir el tipo de organizador y el propósito del mismo.
- Seguidamente, seleccionar los conceptos involucrados.
- Cuando se usen organizadores gráficos por primera vez, es recomendable diseñar un modelo de manera conjunta con los alumnos que sirva como referencia.
- Por último, comunicar criterios de evaluación de acuerdo con las características del organizador, por ejemplo, la jerarquización de los conceptos y el uso de conectores, llaves, líneas y flechas que correspondan.
Ejemplos de rubricas para evaluar los organizadores gráficos
Para evaluar los organizadores gráficos se recomienda usar una rúbrica, la cual es un instrumento de evaluación con base en una serie de indicadores que permiten ubicar el grado de desarrollo de los conocimientos, habilidades y actitudes o valores, en una escala determinada.
Por ello, el diseño de la rúbrica para evaluar los organizadores gráficos se debe considerar una escala de valor descriptiva, numérica o alfabética, relacionada con el nivel de logro alcanzado.
Por consiguiente, se presenta en una tabla que en el eje vertical incluye los aspectos a evaluar, y en el horizontal, los rangos de valoración.











Referencias bibliográficas
Díaz Barriga, F. y Hernández G. (2010). Estrategias docentes para un aprendizaje significativo: una interpretación constructivista. México: McGraw-Hill.